En el mundo de la ingeniería, la función suele jugar el papel más importante, y la forma lleva un papel secundario. Sin embargo, en la actualidad, se ha demostrado que ambas cosas pueden combinarse, e incluso existe un certamen que premia la excelencia estructural desde hace 50 años, los «Structural Awards«. Este galardón reconoce tanto la calidad de la ingeniería como la creatividad, la elegancia y la sostenibilidad. Este 2017, los premios reconocen categorías como la preservación del patrimonio, edificios altos y el arte estructural, pero también se relacionan con desafíos estructurales, lo que ha hecho que la ingeniería alcance nuevos límites y sea llevada al extremo.
Una de las nuevas categorías de este año reconoce a aquellas estructuras levantadas en condiciones extremas, y entre los nominados se encuentran The Majestic Centre, una torre resistente a sismos en Wellington, Nueva Zelanda y una serie de turbinas de energía maremotriz que se han instalado en los agitados mares de la costa de Escocia. Otro de los finalistas es Crow’s Nest – el Nido del Cuervo – una residencia vacacional construida en una zona de deslizamiento activo en la base de un acantilado cuya inclinación, junto con la lluvia y la erosión provocan cambios en el terreno que amenazan la integridad de la construcción. Para evitar daños, la casa se ha asentado sobre una base de vigas que pueden ir ajustándose de acuerdo a los cambios del suelo.
Otros de los proyectos ofrecen soluciones innovadoras para la vida urbana, e incluyen propuestas como un puente peatonal móvil en Ginebra, Jet d’Eau, que se levanta para permitir el paso de los botes a la vez que permite el cruce de personas gracias a un mecanismo de tijera que permite que el puente se levante como una ola, transformando la pasarela plana en una serie de escalones.
Dentro de la terna para estructuras altas o delgadas, encontramos los proyectos 432 Park Avenue, la torre residencial más alta en el hemisferio oeste, y que es además, extremadamente delgada. El desafío estructural que representa, es causado por la delgadez de la torre, ya que sus lujosos apartamentos no deben ser afectados por movimientos o vibraciones. La estructura está hecha por completo de concreto blanco que fue colado in situ, mientras se levantaba la torre, dejando una mínima huella ambiental. La torre de British Airways i360 en Brighton, Inglaterra es una torre de acero cuya estructura reduce las fuerzas del viento, lo que junto a otro truco estructural consistente en 78 contenedores llenos de agua escondidos dentro de la torre, lo que le permite ser sumamente delgada y mantenerse perfectamente estable.
Los ganadores de los premios Structural Awards 2017 serán seleccionados entre los 45 proyectos finalistas, y serán anunciados el 17 de noviembre en la ciudad de Londres, Inglaterra.